14. No me mires con los ojos, hazlo con el corazón

Una semana más tarde…

Lo sabía, si es que soy tonta. Justin no me ha hablado ni un solo día, cuando me mira es como un milagro, por las tardes no viene al “castigo” y ni siquiera me dice por qué…
Decido ir a hablar con él, me dirijo a su habitación sin decir nada a nadie y sin detenerme, voy directamente hacia allí y no me pienso hechar atrás. Llamo, me abre y por lo manos se digna a mirarme.
Paso a su habitación, no le saludo, tampoco lo merece.
-Hola eh-dice
-Ah, ¿ahora si me hablas o que?-le reprocho
Se queda callado, baja la cabeza, cierra la puerta y me pongo frente a él
-Joder Justin… pensaba que no ibas a ser como antes
-¿Por qué? No he cambiado en ningún momento
-Eres un cabrón-le insulto
-No me insultes-me advierte
-Que pasa ¿No te gusta que te digan la verdad?
-Me da igual lo que me digan, pero no me da igual lo que me digas tú
Pum, mi corazón late fuerte, tengo ganas de sonreir, de saltar, de gritar, pero al contrario, le contesto mal, sin ninguna razón, solo porque quiero, por que creo que no me merezco que me traten como él lo ha hecho.
-Pues parece ser que sí-es lo que le respondo
-Todo lo piensas, todo te parece, deberías pararte un poco a ver lo que pasa en realidad-me ataca
-¿Sabes lo que pasa en realidad? Que has conseguido lo que querías y ahora pasas de mí-me defiendo
-Eso no es cierto-parece que le ha dolido
-Mira Justin, he aguantado que me lleves a tu casa, que tu madrastra se meta conmigo, que un borracho me pegue y me deje inconsciente, he tenido que dormir contigo, bueno es más me he pasado contigo tooodo el puto día, me has besado, joder Justin, casi lo hacemos y ahora ni me dirijes la palabra-casi se me escapa una lágrima
-Eso no es…-le corto
-Eso no es cierto,¿ como que no es cierto?¿ Cuantas veces me has saludado desde hemos llegado?¿ Cuantas veces has venido al castigo? ¿Cuantas veces…?
No me deja terminar, me coge la cara y me besa más apasionadamente, y ¿que hago? Pues a la mierda todo. Le beso, le beso y se me olvida todo, juro qu eno sé como lo hace.
Se separa me mira fijamente, nuestros ojos se encuentran y sin poder evitarlo me echo a llorar, él me abraza y escondo la cabeza en su pecho.
-¿Por qué lloras?-pregunta dulcemente
-Porque te odio
Le respondo entre sollozos, él se echa a reír, yo me separo de él y me seco las lágrimas
-Anda, vamos a dar una vuelta.
Dicho esto salimos de la habitación y caminamos por el campus, no tengo ganas de volver a preguntarle por qué no me ha hablado. Nate se acerca a nosotros, está sonriendo, me encanta su sonrisa, podría escribir sobre como és, podría describirla perfectmente, sin equivocarme en absolutamente nada. Recuerdo que hace dos días me envió un mensaje *Kelly, lo  sas tias kero k spas k ella m oblgaba, io no keria, pr fvr creme* No me gusta qu elas personas se coman las letras en los sms ni en el twitter ni nada de eso, no se si soy la única, pero odio que la gente escriba así. Lo he pensado y no sé por qué tiene tanto interés en que yo le crea, joder ni si quiera sé como ha conseguido mi taléfono, espero que no sea un acosador o algo de eso, que miedito. Se acerca sonriente y cuando se para delente de nosotros Justin pone cara de asco y yo niego con la cabeza.
-Hola Kelly-me saluda
-Hola Nate-saludo yo
-Hola bro, ¿Qué tal?-saluda a Justin
-Hey tio-chocan las manos
-¿Te puedo robar a Kelly?-pregunta a Justin
-Creo que eso deberías preguntarmelo a mí-respondo por Justin
-¿Vienes a dar una vuelta?-me pregunta
-No, lo siento ahora estoy con Justin
Rechazo su propuesta, no voy a dejar tirado a Justin por un tio por el qu ehe sufrido durante 6 años.
-Ah bueno-dice rascandose la nuca
-Adiós-me marcho
Camino al lado de Justin pero me agarran el brazo y me giro, es él, Nate, sonríe.
-No me puedo ir sin decirte esto, Kelly me gustas, me gustas mucho, no se desde cuando solo sé que quiero estar contigo, no porque estés buena-alzo una ceja-bueno eso ambién, pero me gusta, bueno mejor dicho, me encanta como eres y necesito que estés conmigo
Me quedo en silencio, siento como mi corazón se ha parado, pero de pronto empieza a bombear mucho más fuerte, no me esperaba esto, y mucho menos de él.
-Bueno di algo-dice impaciente
-Lo…lo tengo que pensar
Y me marcho otra vez con Justin, pero no anda, se me queda mirando así que yo tampoco ando
-¿Qué te ha dicho?-pregunta
-Me ha pedido salir-soy sincera
-¿Qué le has dicho?
-Que lo tengo que pensar
-Ah, vale, me tengo que ir, adiós Kelly
Y se marcha dejándome aquí tirada, ¿Qué he dicho ahora mal? Joder, no he dicho nada para que se vaya así, ahora me siento mal.
Al día siguiente…
-¿Qué le has dicho,? Veeeeeenga cuenta, cuenta-dice Patri impaciente
-Ay hija, tranquilízate, parece que estás más ilusionada tú que yo-le digo riendo- A ver, pues le he dicho qu elo voy a pensar, pero creo que le voy a decir que no…
-Tiiiia, por qué? Dile que sí, llevas deseando esto mucho tiempo
-Ya Patri, pero no estoy segura, me gusta, claro que me gusta, pero ha tardado seis años en hablarme…
-Bueno, como quieras, tienes que estar al 100 por 100 segura, y si le quieres adelante
-Gracias Patri-sonrío
-No me las des cielo y vete ya o no llegas al castigo
-Adióóós, pásalo bien. Te quiero-me despido feliz
-Adiós, te quiero
Salgo por la puerta y me dirijo al aula de música, Justin está dentro, está cantando como la primera vez que vine aquí, su grave pero dulce voz se cuela por mis oídos, es la voz más maravillosa que he escuchado nunca, puedo incluso sentir como sus dedos se posan delicadamente sobre las teclas del piano, haciendo qu ecobre vida. Sé de que canción se trata, Someone like you de Adele, pero ahora mismo no me importa si la canta mejor o peor que ella, solo cierro los ojos y disfruto de la melodía, puedo sentir como la canción llega hasta mi corazón y me hace sonreir, es una sensación extraña, extraña pero agradable. Me quedaría así, escuchándole hasta que el sol dejara de brillar, pero me conformo con escuchar la canción hasta el final y entrar en el aula.
Entro sonriente, pero no dice nada, solo me mira, él no sonríe y dejo de hacerlo yo.
-Hola-saludo
-Te vas a cambiar o empezamos ya?-pregunta
Me dan ganas de gritarle, de gritarle que es un gilipollas, pero me contengo.
Eso que me ha hecho sentir cuando cantaba ha sido especial, me ha hecho sentir bien, como volar hasta otro mundo y tocar el mar, incluso tocar el cielo.
-Empezamos ya, cuanto antes mejor-respondo
Llevo unos shorts, unas adidas blancas y rosas, la chaqueta también es de la marca de las zapatillas, negra con las rayas blancas. Justin lleva un pantalón de chándal del mismo diseño que mi chaqueta, unas supra blancas y una camiseta básica del mismo color, que se ajusta a su cuerpo y le sienta muy pero que muy bien. Dejo de mirarle y me concentro en sus ojos. Me coge de la mano y la sujeta con la suya a la altura de su hombro, su otra mano la pone en mi cintura, me pega a él, más de lo que esperaba, trago saliva, estamos muy cerca y me pongo nerviosa. Pongo mi otra mano en su hombro.
Empezamos a bailar, él me guía, no parece tan difícil, pero sin esperármelo me da una vuelta y me choco contra él fuertemente y nos caemos al suelo, esto me recuerda cuando estábamos en la playa solo que ahora soy yo la que está encima de e´l y creo que le he hecho un poco de daño. Me levanto rápido y le ayudo.
-Estás bien?-pregunto preocupada
-Si, tranquila, mejor tomamos un descanso-propone
No me opongo y me siento donde él antes estaba tocando el piano. Me cojo una coleta alta mientras él bebe agua y cuando termina le hablo.
-Justin-susurro
-Que?-utiliza el mismo tono
-Me enseñas a tocar algo?
Señala el piano, yo asiento. Me levanto y él se sienta, me sienta encima suya y coloco mis manos sobre el piano, él lo hace sobre las mías y cierro lo sojos al sentir el tacto de su piel en mis manos.
-A ver, tu tocas Fa La cuatro tiempos-me indica haciendo que abra los ojos-ya
Pongo los dedos sobre esas teclas y las dejo pulsadas a la vez, justamente cuatro mientras él toca algunas teclas más, suena bien, a pesar que él lo ha hecho todo.
-Bien, ahora atenta
Mueve las manos en el piano, gravo las notas en mi mente <mi sol do do do> Repito sus movimientos. Toca unas cuantas más <si la sol fa mi sol> Repito como antes.
-Ahora todo seguido-susurra
Y lo consigo, toco la melodía y suena bien, sonrío, le miro y él también lo hace, está sonriendo con esa preciosa sonrisa que me encanta, he conseguido que sonría. Le abrazo, no sé por qué, es un impulso aunqu eme siento un poco como una tonta, pero entonces él me devuelve el abrazo y ya no me siento así.
-Mañana te enseño la otra parte de la canción-me dice
Yo asiento sonriente
-Me tengo que ir, nos vemos mañana-me despido
-Claro preciosa, adiós
Salgo del aula, algo ha cambiado, ha pasado del fea al preciosa. Cuando estoy con Justin me siento bien, me siento muy bien, es una senseción extraña pero me gusta aunque a veces eso también me asusta.
Me encuentro con Nate antes de llegar a mi habitación
-Hola guapa-me saluda
-Hola Nate
-Oye, por qué no te vienes a dar una vuelta conmigo?-pregunta
-Claro, me cambio y nos vemos-propongo
-Vale nena, no tardes
Me dirijo a mi habitación y entro, Patri está dentro hablando con David, supongo que ya lo han arreglado, saludo y cojo mi ropa, me meto al baño y me ducho, me visto y dejo que mi pelo se seque al aire. Cuando salgo del baño Patri ya no está, pero llaman a la puerta y abro ilusionada aunque me encuentro con que es Brit la que está y no Nate. Me sonríe y le devuelvo la sonrisa. Llaman de nuevo y ahora él si está en la puerta, sacude su flequillo y sonrío. Nos damos dos besos, cojo mi bolso y salgo, me agarra por la cintura y caminamos así. Cuando vamos a bajar las escaleras veo como Justin entra en su habitación, pero entra bien acompañado, va besando a una chica, sé lo que vendrá después de los besos, quito la imagen de mi cabeza porque no lo quiero reconocer pero me ha hecho deño ver eso.
-Que te pasa?-pregunta Nate
-Nada-sonrío-¿Dónde vamos?
-Al parquesur
-Que bien
Caminamos hasta el metro, él no tiene coche. Sé que se lo pidió a sus padres cuando cumplió los 16, pero como le quedaron dos no le dejaron.
…
Llegamos a mi habitación, me da un beso en la mejilla y no sé que decir pero en mi cara hay una sonrisa, ha estado ahí toda la tarde, no puedo parar de sonreir, pero me siento bien así
-Me voy nena, nos vemos mañana en clase de gimnasia.
Voy a corregirlo, a decirle que no es gimnasia si no educación física, pero me callo, no quiero estropearlo
-Adiós Nate, lo he pasado bien-me despido
Me vuelve a dar un beso en la mejilla y se marcha, observo como camina, suspiro y me meto en la habitación. Nate es un cielo, creo que por eso me gusta tanto