-Hola-responde al otro lado de la línea
-¿Qué tal?-pregunto
-Mejor, he llamado a un amigo que es psicólogo y lleva hablando con ella una hora-me explica
-Me alegro, verás como está bien en seguida-le doy ánimos
-Gracias, yo también, no tengo muchas ganas de hablar-dice con voz ronca
-Vale, tranquilo, te llamo más tarde.
-Vale, Kelly gracias por todo, de verdad.-se despide
-Cuidate Ryan, adiós-me despido
-Adiós-cuelga
Me levanto del sofá y dejo el móvil encima de la mesa, voy a la cocina y preparo café. Me pongo un poco en una taza y me abrocho la chaqueta, salgo al jardín y me siento en una de las tumbonas. Miro al cielo, a lo azul que hoy está y deja ver el Sol brillante. Ahora si que me gustaría tener alas, ser un pájaro, o mejor, ser un hada y encontrar un camino a un mundo mágico donde todo el mundo es feliz. De pronto siento como me abraza por detrás y me estrecha entre sus brazos.
-Buenos días bonita-dice, después se sienta a mi lado
-Hola Justin-le dedico una sonrisa
-¿Qué tal?-pregunta
-No sé-me encojo de hombros-¿y tú?
-Bueno...-responde mirando donde yo
-¿Quieres?-le ofrezco mi taza
La coge y bebe un trago, me la devuelve.
-Ayer me prometiste que estarías bien-dice mirándome
Asiento
Me pasa un mechón de pelo detrás de la oreja y se acerca haciendo desaparecer la distancia, la rompe del todo y me besa despacio, suavemente. Se separa y nos quedamos abrazados mirando a la nada, pero juntos.
-Justin, ¿te puedo preguntar algo?
-Claro
-¿Has estado con muchas chicas?-pregunto
-¿Por qué quieres saber eso?-dice extrañado
Me encojo de hombros.
-Pues si-responde a mi pregunta-pero nada serio, no he pasado con ellas más de una noche-aclara
-¿Y novias?-pregunto con curiosidad
-No-se queda callado un instante- ¿Y tú has estado con muchos chicos?-pregunta ahora él
Niego con la cabeza
-Estuve con un chico a los catorce que resultó ser un capullo, con Nate, que casi no cuenta y contigo.
-¿Y no has estado liada con nadie?-pregunta con curiosidad
-No, en cuanto me pusieron el aparato y las gafas me quedé medio marginada y me enamoré del imbécil de Nate que era el capitán del equipo de fútbol-recuerdo
Enreda sus dedos en mi pelo.
-Pero tampoco me hacía falta una relación-digo mirando como mis dedos juegan con la pulsera que me regaló Justin
-¿Por?-pregunta interesado
-Porque no, siempre he estado acostumbrada a que se metieran conmigo, sobre todo los chicos-le explico
-Pues seguro que si te vieran tendrían que arrepentirse-dice seguro
-¿Por qué?
-Porque si, eres preciosa, desde siempre, y a demás si no se arrepintieran yo los obligaría a hacerlo-suelta una carcajada
Sonrío y lo miro, le doy un beso mojado en los labios.
-Vamos dentro cielo, que al final vamos a coger frío-me dice
Me levanto y detrás de mí él. Pasamos a dentro y nos sentamos en el salón. Me encanta que me diga cielo, suena tan bien con su voz... Dejo caer mi cabeza en su hombro y él acaricia mi pelo, hay silencio, no hay nada que decir. En realidad si, sé que se muere por decir algo para que hablemos, pero sabe que ahora mismo no necesito hablar, solo necesito que se quede así, sin decir nada. Su móvil suena y lo coge con una sonrisa.
-Mamá-dice alegre
Lo observo mientras habla con su madre.
-Muy bien, ¿y tú?-pone el altavoz
-Bien cariño, ¿ya se han ido Denisse y tu padre?
-Si, se fueron ayer por la mañana-su expresión cambia
-¿Te has quedado solo?
-No, estoy con Kelly-me mira
No conozco a su madre, bueno tampoco tenía previsto conocer algún día a su padre, ni si quiera sabía que iba a llegar a quererle de la manera que le quiero.
-Ah, la muchachita que te trae loco-su madre se ríe
-No, ya es mi novia oficialmente-sonríe
Una sensación recorre mi estómago, sus palabras se repiten en mi cabeza "es mi novia oficialmente"
Su madre suelta una carcajada
-Bueno hijo, me alegro de que estés bien. ¿Estudias mucho?
-Si, estoy estudiando-se ríe
-¿Seguro?
-Si mamá-dice poniendo los ojos en blanco
-Vale, bueno tengo que ir a trabajar, cuidate y cuida a esa chica. Te quiero
-Que te vaya bien, adiós te quiero-se despide de ella
Cuelga el teléfono y suelta un suspiro, le miro. Paso mi mano por su nuca y me mira. En realidad, ahora podría soltar cualquier cosa pero decido callarme y me acurruco en su pecho, abrazándole mientras él también me abraza a mí. A veces tengo la sensación de que él sabe lo que necesito, pero creo que ahora yo soy la que sé lo que necesita, no porque lo adivine ni nada de eso, pero pienso en lo que yo necesitaría y lo hago, hago lo que creo que él necesita y en este momento seguro que quiere un abrazo y yo no soy quien para decirle que no, porque para que mentir, me encanta abrazarle. Esta vez suena un móvil, pero es el mio, en la pantalla se lee ~Casa~ pero es imposible que sea mi madre. Respondo y como ha echo antes Justin pongo el altavoz.
-¿Si?-pregunto dudosa
-¿Kelly?-preguntan al otro lado de la línea
-Si, ¿quién eres?
-Tata-resuelve mis dudas
Oh, es Jessie, mi hermanita pequeña, las lágrimas se apresuran a salir pero lo impido. ¿Por qué me llama mi hermana?
-Princesa... ¿Que tal todo?
-Muy bien, ¿y tú?
-Genial, ¿por qué me has llamado?
-Te echo de menos-dice con tristeza
-Y yo cariño, pero no te preocupes que en cuanto pueda un día voy a verte-sonrío, sé que ella también-¿y mamá?
-Trabajando, se tira todo el día fuera, aunque ahora le dejan librar un día y ese día vamos a casa de la abuela-dice feliz
La encanta ir en casa de nuestra abuela, seguro que cada vez que van, Jessie insiste a mi abuela para que haga pastel de vainilla, si por ella fuera sería lo único que comería el resto de su vida.
-Que bien-hago una pausa-Oye, ¿estás sola en casa?
-No, estoy con la tía que se ha venido unos días a casa-me explica
-¿Y el cole?
-Bien, estoy aprendiendo francés-dice ilusionada
-¿Si? Pues cuando seas un poco más mayor podremos ir a Paris de vacaciones-la escucho reír
Ya estaba ahorrando para ello, llevo dos años ahorrando y ya tengo casi lo suficiente como para pasar allí dos semanas con ella, es su sueño porque allí está Disney Land y quiere conocer a Mickey Mousse.
-¿Y veremos a Mickey Mousse?-pregunta
-Por supuesto-asiento
-Promete
-Te lo prometo
-Oye Kelly, me llamarás otro día, ¿verdad?-dice con timidez
-Claro princesa-acepto
-Pues entonces te dejo que tengo que sacar a Limón, te quiero.
Limón, nuestro perro, su nombre es en honor a su pelo rubio que parece el color de la piel de un limón, me lo regalaron mi madre y mi hermana por mi anterior cumpleaños y solo han pasado cinco meses de eso así que todavía es un cachorro porque cuando me lo dieron a penas tenía dos semanas, aunque con él he pasado menos de dos meses pero le he cogido un montón de cariño.
-Adiós cielo, te quiero.
Cuelga y me quedo mirando al teléfono, Justin me mira, dirijo mi mirada a sus ojos, él mira los míos inundados en lágrimas que no quiero que salgan, como echo de menos a mi hermana, siempre estaba con ella y llevo tres meses sin verla y eso es lo que peor llevo, por eso no la he llamado, porque en cuanto escucho su voz me entran unas terribles ganas de llorar incontrolables.
-Que rica es tu hermana-me sonríe Justin
Aunque las lágrimas bajen por mis mejillas le sonrío. Me quita las lágrimas con sus dedos y me abraza fuerte.
-¿Quieres que vayamos a verla?-pregunta
-Justin, son cuatro horas de viaje
-Venga ya, cuando fuimos a la playa tardamos más o menos lo mismo, tenemos tiempo suficiente, no hay toque de queda-sonríe
-¿Seguro?-le miro a los ojos
Asiente
-Gracias-susurro
Y le beso dulcemente y se sonríe sobre mis labios cuando hago un recorrido con mis manos sobre su torso. Preparamos una mochila con todo lo necesario y comemos un bocadillo. Nos montamos en su coche y ponemos rumbo hacia mi casa, es un pueblo pequeño, todo el mundo es muy amable siempre y cuando tú también lo seas claro.
...
Llegamos, mi casa está como siempre. Me quito la chaqueta ya que aquí no hace la misma temperatura que en casa de Justin, cogemos las pocas cosas que hemos traído y nos dirigimos a la puerta. Llamo al timbre y me abre mi tía que me abraza, pero deja de hacerlo en cuanto mi hermana grita mi nombre y viene corriendo hacia mí. La sostengo en brazos mientras me abraza lo más fuerte que puede y pasamos a mi casa ya que Jessie no quiere soltarme. Mi tía, Rachel aprovecha y va a hacer sus cosas, yo me llevo a Justin y a Jessie al salón, me siento con la pequeña en mi regazo y mi chico se sienta a mi lado. Cuando me deja de abrazar una sonrisa preciosa invade su cara.
-Sorpresa-susurro
-No me lo esperaba-dice, está nerviosa pero no sé por qué
-¿Que te pasa?-pregunto extrañada
Mira a Justin, él nos observa sonriendo también.
-¿Quién es?-me pregunta al oído
-Es Justin, Justin ella es Jessie-les presento
-Encantado-le coge la mano y la estrecha entre la suya
Mi hermanita se queda quieta y acepta que le coja la mano. Oh bien, a mi hermana parece que le cae bien Justin.
-¿Cuantos años tienes?-le pregunta Justin
-Siete, voy a segundo-añade
-Que bien-dice, mi hermana sonríe
-¿Sois novios?-pregunta la niña con curiosidad
Justin asiente con seguridad, yo también pero lo hago con timidez, mi hermana se ríe.
-Que guapo-me dice al oído
Me río y Justin me mira, le hago un gesto como de que luego se lo digo y asiente. Bueno, hemos empezado con buen pie, por lo menos piensa que es guapo y parece que se van a llevar bien, porque a parte Justin se porta genial con los niños pequeños.
Mi móvil suena y me alejo de Justin y mi hermana, voy a la cocina y me siento, respondo.
-¿Hola?
-Kelly...
-¿Patri?-pregunto casi gritando
-Si...-responde con la voz rota
-¿Qué tal?-pegunto
-Mejor, un amigo de Ryan que es psicólogo ha estado hablando conmigo y me siento mejor-afirma
-Me alegro muchísimo de verdad-digo de corazón
-Lo sé, ¿te puedo llamar luego?-pregunta, insegura
-Claro, cuando quieras
-Gracias...
-No me des las gracias...
Cuelgo, es verdad, no tiene por qué hacerlo, las amigas siempre están ahí cuando la otra lo necesita y ahora ella me necesita... Me alegro de que me haya llamado ella en vez de Ryan, por supuesto que me fio de él, pero necesitaba escuchar como ella decía que estaba mejor...
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